Con la llegada del verano a nuestra costa, las embarcaciones de recreo proliferan como los miles de turistas que durante estos meses nos visitan. Los veleros, lanchas, botes y un sinfín de embarcaciones de todo tipo se multiplican por toda la Costa Blanca.
La documentación del barco, permiso de navegación y seguro, así como la ITB al día, son algunos de los primeros aspectos que la Guardia Civil nos requiere a la hora de navegar; junto a la cercanía a la costa y la falta de mantenimiento de las embarcaciones tras meses en el puerto supone el 25 por ciento de las infracciones. Durante el 2018 la Guardia Civil detectó más de 300 infracciones en la provincia de Alicante.
Antes de empezar a desgranar algunos consejos básicos para disfrutar de nuestra embarcación al máximo este verano, tenemos que tener clara cuál es la máxima de todas ellas: la seguridad. Parece una premisa bastante clara y entendible, sin embargo, con la llegada del periodo estival, Salvamento Marítimo multiplica sus actuaciones de emergencia a lo largo de los 6000 kilómetros de costa con los que cuenta España. En concreto, este cuerpo de emergencia marítima realiza 43 actuaciones cada 24 horas.
Errores humanos y fallos mecánicos son las principales causas de estas situaciones de emergencia en medio del mar. Situaciones que en la mayoría de los casos no habrían ocurrido si se hubieran seguido estos sencillos consejos antes de salir a navegar.
-Consejos para salir a navegar con tu embarcación:
1º Revisar el estado de tu embarcación: Parece obvio pero muchos de los propietarios que cuentan con una embarcación de recreo no realizan la puesta a punto con la llegada del verano. Y es en medio del mar, cuando vienen los problemas y en muchas ocasiones con consecuencias que agravan y hacen más dificultosa la reparación de nuestra embarcación. Para un buen estado óptimo de la misma es necesario realizar una revisión para tratar de evitar fallos mecánicos o de estructura de la embarcación. Además, la comprobación del sistema eléctrico y batería, es también clave para evitar situaciones de peligro una vez nos decidamos a partir de puerto.
2º Conocer las técnicas de primeros auxilios básicos: Son inumerables las situaciones con las que nos podemos encontrar una vez salgamos a navegar con nuestra embarcación. Una de ellas es algún contratiempo que pueda sufrir alguno de los tripulantes a bordo. Por ello, tener unos conocimientos de primeros auxilios pueden ser el factor clave para evitar cualquier mal mayor; desde desmayos o fracturas, hasta pérdida del conocimiento. Por ello, los primeros auxilios serán un factor decisivo para actuar ante una situación de emergencia, a la espera de la llegada de los profesionales.
3º Comprobar el material necesario para navegar: en este punto hemos de tener en cuenta la zona en la que vamos a navegar. Dependiendo de las características de la zona deberemos llevar un tipo de material u otro. Por lo general, existen cinco categorías de equipamiento que deberemos llevar: navegación, salvamento, armamento diverso, achique y contra incendios y prevención de aguas sucias. Además, también es importante que este material esté siempre bien señalizado dentro de la embarcación; al igual que ser accesible para cualquiera de los tripulantes.
4º Comprobación del estado del motor: Una de las partes clave de una embarcación es el motor ya que es el núcleo que nos permite navegar. Por ello, es importante una exhaustiva revisión del mismo por parte de nuestros profesionales de puerto. El motor no debe de presentar ninguna pérdida de combustible o aceite, por mínima que sea.
5º Conocer la ruta que vamos a navegar: Una buena planificación de nuestra navegación es clave paraa tener unos conocimientos previos para navegar en modo segur. Analizar los posibles peligros con los que nos podemos enfrentar nos ayudará a actuar ante una situación de emergencia. Conocer de primera mano las condiciones metereológicas es esencial si no queremos llevarnos ninguna sorpresa con algún role de viento inesperado con el que no contábamos en nuestro placentero día de mar.
6º Conocer el uso y lenguaje de las radiocomunicaciones: en este punto es la normativa vigente la que marca el sistema de radiocomunicación que debe de llevar cada embarcación. Pero por lo general, cuanto mayor sea el trayecto a navegar, más complejo y seguro debe ser este sistema. Un conocimiento básico del sistema de radiocomunicación puede determinar el éxito de una actuación de salvamento a millas de la costa.
7º Comprobación documentación: Como hemos dicho, este es uno de los puntos que más infracciones genera. Por ello, es imprescindible antes de salir a navegar tener toda la documentación en regla, además de estar en posesión del permiso que nos acredita para la navegación de dicha embarcación; al igual que navegar en la zona permitida. Otro de los puntos que más infracciones sancionables provoca es no llevar al día el seguro de responsabilidad civil para embarcaciones de recreo. Un punto importante si queremos evitar una multa y sobre todo navegar con la seguridad estar cubiertos ante cualquier situación de emergencia.
8º Informar de la salida y llegada a puerto: parece un punto baladí, pero son muchos los navegantes que no realizan este sencillo gesto abandonar su puerto base. Las ganas por echarse al mar muchas veces solo nos dejan pensar en nuestra travesía; pero dedicar un minuto a informar al personal de puerto de nuestra partida puede ser un factor muy determinante a la hora de tomar medidas ante una situación de emergencia. Además, este punto nos ayudará a comprobar que el sistema radiofónico funciona correctamente.
9º Distribuir los pesos adecuadamente en la embarcación: la incorrecta distribución de los materiales y personas que van a bordo de la embarcación pueden dificultar en gran medida la navegación o estabilidad de la misma. Al igual que conocer el número máximo de tripulantes también será un punto clave a la hora de evitar sanciones y males mayores. Los niños que viajen en la embarcación deben de llevar chalecos específicos para su edad.
10º Botiquín a bordo: Por último, aunque cumplamos todas las medidas anteriores, siempre pueden surgir imprevistos con los que no contábamos: insolaciones, mareo o vómitos… Ante estas situaciones, un botiquín a bordo puede ser determinante. Aunque cabe recordar que es necesario su revisión periódica; sobre todo de un año a otro.
Siguiendo estos sencillos consejos podremos de nuestra embarcación de recreo para que solo tengamos que preocuparnos de disfrutar al máximo de nuestra travesía. Por ello recomendamos a nuestros socios y usuarios que visiten el Varadero del CN Campello para su puesta a punto.